El Índice de Precios de Consumo (IPC) final  en Reino Unido, aumentó un 9% interanual en abril, frente al 7% de marzo, alcanzando el mayor incremento de los precios desde que existen registros. Se trata de la tasa de inflación más alta de la serie estadística nacional, que comenzó en enero de 1997.  En términos mensuales, el IPC subió un 2,5% en abril, frente a una subida del 1,1% en marzo. El Banco de Inglaterra elevó hasta el 1% los tipos de interés como respuesta a la elevada inflación, alertando sobre el endurecimiento de las condiciones para poder controlarla.