Hoy martes 30 de abril entran en vigor las nuevas reglas fiscales de la UE, que, tras cuatro años congeladas por la pandemia, volverán a establecer límites de deuda y déficit a los estados.

El objetivo de esta reforma es reducir las ratios de endeudamiento de los estados y los déficits de manera gradual y realista sin que comprometa la inversión y que sea favorable al crecimiento.
Una vez aprobadas las normas, cada estado miembro deberá presentar los planes nacionales antes del 20 de septiembre de 2024. Paralelamente la Comisión presentará una trayectoria de referencia en los países donde la deuda supere el 60% del PIB o el déficit se sitúe por encima del 3%. La Trayectoria de referencia consistirá en como los Estados miembros pueden garantizar que, al final de un período de ajuste fiscal de cuatro años, la deuda pública este en una trayectoria descendente o se mantenga de forma prudente o estable.

Ahora bien, los países con excesiva deuda estarán sujetos a normas de salvaguarda que le exigirán, entre cosas, reducir su deuda en un promedio de 1% si superan el 90% del PIB y un 0,5% anual en promedio si la deuda está entre 60% y 90% del PIB.

Asimismo, si el déficit de un país super el 3% del PIB, el requisito será reducirlo durante los períodos de crecimiento hasta alcanzar un nivel del 1,5% del PIB a fin de crear una reserva de gasto para condiciones económicas difíciles.

Los países con exceso de deuda, no estarán obligados a reducirla a menos del 60& al final del período sino que la deuda debe tener una trayectoria descendente.