MADRID, 21 (EUROPA PRESS)

El beneficio neto atribuido de Alantra Partners registró una caída del 81,3% en el conjunto de los seis primeros meses de 2023, hasta situarse en 4,1 millones de euros, algo que la compañía ha atribuido al parón de la actividad en el mercado de fusiones y adquisiciones, según ha informado este viernes la compañía de servicios financieros.

"Si bien el nivel de actividad del segundo trimestre presenta una ligera mejoría con respecto al primero, el entorno de mercado permanece complicado, con un volumen de M&A en niveles muy bajos", ha indicado la firma. Además, ha explicado que la coyuntura financiera y monetaria están afectando "negativamente" a la actividad de levantamiento de fondos para gestión de activos.

Los ingresos netos de Alantra Partners fueron de 83,8 millones entre enero y junio, lo que supone una caída del 28,3% respecto al mismo periodo de 2022. Por segmentos de negocios, la banca de inversión facturó 52,6 millones, un 27,3% menos, al tiempo que el negocio de asesoría de carteras se situó en 15,3 millones, un 45,6% menos.

En tercer lugar se mantuvieron los ingresos por gestión de activos, los más resilientes. La firma contabilizó una facturación de 14,8 millones de euros, un 8,1% menos.

Por otro lado, Alantra redujo un 14,1% sus gastos de explotación en el semestre, hasta los 79,9 millones de euros. De esa cifra, 57,4 millones de euros eran gastos de personal, un 15,1% menos, mientras que el resto de costes de explotación cayó un 18,3%.

El grupo ha destacado que a 30 de junio mantenía una "sólida posición financiera" con una posición de tesorería neta de 125,3 millones de euros u otros 38,4 millones de euros en cartera atribuible de inversiones en productos gestionados.

Asimismo, Alantra cerró el semestre con 2.160 millones en activos bajo gestión directos, al tiempo que mantenía otros 13.700 millones de euros en activos bajo gestión o asesoramiento de socios estratégicos.

El grupo ha destacado que en los seis primeros meses del año ha asesorado en un total de 86 operaciones, de las cuales 62 eran de banca de inversión y las 24 restantes pertenecían a asesoría de carteras de crédito.