El presidente de México evita fijar una postura sobre la reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales
05/12 18:33   Fuente:Europa Press

Empresarios de México como el magnate Carlos Slim se han mostrado en contra de reducir las horas de trabajo

MADRID, 5 (EUROPA PRESS)

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha explicado que va a esperar a que se resuelva el debate parlamentario sobre la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales para, posteriormente, fijar una postura.

El mandatario, durante su conferencia matutina, ha señalado que "hay tiempo" y que se trata de un asunto que no se puede resolver en unos días, sino que necesita reflexión y una exposición pausada de razones para proceder a su aprobación.

"Propondría respetuosamente que se evite imponer una fecha fatal y que se dé tiempo y se invite a todos a revisar lo que sucede en otros países, conociendo cómo es su jornada laboral, como por ejemplo en Estados Unidos", ha argumentado López Obrador.

Así, ha llamado a abrir un debate que no se limite al ámbito parlamentario, sino que cuente también con la participación de los empresarios, de los trabajadores y de expertos en la materia.

La votación definitiva para aprobar la reducción de la jornada laboral a 40 horas está prevista para el próximo 12 de diciembre. Sin embargo, el presidente de México ha comentado que no necesariamente es un asunto que se deba cerrar en el período legislativo que concluye este mes de diciembre, sino que podría quedar para más adelante.

Algunos destacados empresarios de México como el magnate Carlos Slim se han mostrado en contra de reducir las horas de trabajo. Para el presidente de compañías como América Móvil, mantener la jornada laboral de 48 horas permite a los trabajadores asegurarse mayor poder adquisitivo y tener más ingresos.

Mientras, varios movimientos sociales se han manifestado a favor de la reducción, llamando a movilizaciones alrededor de la Cámara de Diputados para exigir su aprobación cuanto antes.

La propuesta de reducción de la jornada implica un cambio en la Constitución de México y permitiría a los trabajadores garantizarse dos días de descanso en la semana.