MADRID, 7 (EUROPA PRESS)

Los bancos acreedores de Joaquín Rivero no podrán ejecutar las garantías de los préstamos que concedieron al empresario y quedarse con las acciones de la inmobiliaria patrimonialista francesa Gecina propiedad de este empresario.

Así lo determina el Juzgado de lo Mercantil número 8 de Madrid al desestimar el recurso presentado por un grupo de bancos acreedores contra la medida cautelar que en este sentido dictó en octubre de 2012.

La medida se acordó en paralelo a la declaración de concurso de acreedores de Alteco, la sociedad a través de la que Joaquín Rivero participa en Gecina, y que suma una pasivo de 1.600 millones de euros.

No obstante, un grupo de bancos presentaron un recurso contra esta medida cautelar, recurso que ahora rechaza el juez titular de este tribunal, que además impone a las entidades el pago de las costas procesales.

Según este auto, fechado el 5 de febrero y al que tuvo acceso Europa Press, las entidades financieras que recurrieron esta medida cautelar son Natixis España, Banco Popular, Caixa Geral de Depositos, Merryl Lynch, Bank of America, Eliseo Finance Sarl, Bankia, Goldman Sachs e Hypothenken Bank.

En el auto de octubre de 2012 por el que acordó la medida cautelar, el juez argumentó que la ejecución de las garantías por parte de los bancos ocasionaría un "enorme daño" a Alteco, sociedad titular de las acciones de Gecina en manos de Rivero.

"Dichas acciones constituyen prácticamente el total de la masa activa del concurso de esta empresa, por el que su ejecución consumiría todo el patrimonio destinado a satisfacer a los acreedores, particularmente a los que no tienen garantía sobre las acciones, a los que generaría un perjuicio irreparable", argumentó entonces el juez.

Según el auto de declaración de concurso de la empresa de Rivero, la firma cuenta con un activo (fundamentalmente integrado por las acciones de Gecina) valorado en 835,82 millones de euros y un pasivo de 1.600 millones, que lo arroja un 'agujero patrimonial' de 812 millones.